18 de julio de 2016

Una puerta, un respaldo

La verdad es que hasta ahora me parecía innecesario que la cama tuviese respaldo, no sé si es este invierno crudo, el frío, las ganas de sentirme más contenida y protegida y que el cuarto se vea más cálido lo que me convenció de poner uno. 
Hace unos meses mandé a hacer una expedición al altillo de casa (hace 4 años que vivo acá y me niego a conocerlo) y el hallazgo fue asombroso: una divina puerta de pinotea. Hubo que adaptarla un poco porque era más grande, decaparla, lustrarla y finalmente colgarla y entonces habemus respaldo!





Según el Feng Shui es importante que nuestra cama tenga una cabecera solida. La cabecera tiene la función de darnos apoyo y protección al dormir, por eso las ideales son las de forma rectangular y de madera, o bien tapizadas.

Después de dormir un par de noches con el nuevo respaldo puedo aseverar que sumarlo fue una excelente decisión!

Gracias por leer!
Hasta la próxima.
Gabi




3 comentarios:

marcela cavaglieri dijo...

Ay Gaby, mira lo que te estabas perdiendo!!! crees que yo recorra tu ático????? jajajaj Te quedo genial!

Anónimo dijo...

Quedó precioso Gaby! Yo encontré en la calle una puerta muy parecida a la tuya (toda decapada con el paso del tiempo!) y me encantaría convertirla en un respaldo para mi cama. Lástima que Adrogué me queda taaan lejos!!! Un beso enorme!

Anónimo dijo...

Me olvidé de escribir el nombre!
Besos
Ana